El regreso de Jude Bellingham debía ser la noticia más esperada por la afición del Real Madrid. Sin embargo, lo que debía ser un alivio se ha convertido en motivo de inquietud: el inglés, tras pasar por una delicada cirugía en el hombro, no ha recuperado aún el nivel que lo convirtió en figura indiscutible antes de su lesión.
En los últimos partidos, el centrocampista de 22 años ha mostrado una versión lejos de la esperada: poca influencia en el juego, pérdidas de balón inusuales y una evidente falta de ritmo competitivo. Estas señales han despertado preguntas incómodas tanto en la prensa como entre los seguidores blancos.
Algunas versiones apuntan incluso a que el club habría “forzado” su regreso antes de lo previsto, con el objetivo de reforzar al equipo en un tramo exigente de la temporada. Esta hipótesis ha generado preocupación sobre si el físico de Bellingham está realmente preparado para sostener el ritmo que exige el calendario de LaLiga y la Champions.
Fuentes cercanas al vestuario aseguran que, a pesar de su discreto rendimiento, el jugador mantiene intacto su compromiso y trabaja a diario para recuperar la plenitud. Sin embargo, la duda persiste: ¿se está arriesgando demasiado a costa de su salud y de la temporada del equipo?
Para Xabi Alonso, la situación requiere paciencia: “Es normal que, tras una operación y un parón tan largo, un jugador tarde en encontrar su mejor versión. Lo importante es que Jude se sienta fuerte poco a poco”, declaró el entrenador.
El Real Madrid necesita al mejor Bellingham, pero el tiempo será el juez de si su regreso fue una decisión acertada o un riesgo innecesario. La afición, mientras tanto, observa con ansiedad cada paso del mediocampista inglés.